Joven con gafas, gorro azul y chaqueta naranja y negra, sonriendo en un entorno de bosque.

Todo empieza con un sueño.

Después de años interesándome e investigando sobre la fotografía, fue en 2015, tras la pérdida de mi madre, cuando comenzó realmente mi camino como fotógrafo. Adquirí mi primera cámara, que se convirtió en una herramienta para canalizar mis emociones y dar sentido a lo que estaba viviendo.

Tras 4 años haciendo fotos a prácticamente todo y formarme de manera autodidacta, llegaron mis primeros encargos profesionales que me permitieron creer en un futuro como fotógrafo profesional.

Me considero una persona con ganas de descubrir y mejorar día a día, tanto en el ámbito profesional como en el personal.

Actualmente me dedico a la fotografía de hoteles e inmuebles, trabajando con empresas de primer nivel en el sector inmobiliario y hotelero, muchas de ellas de alcance internacional, con un estilo que busca destacar la armonía, la luz natural y la amplitud de cada espacio